En una finca de asentamiento rural, existe una vivienda unifamiliar, que en su día la utilizaron los medianeros. Debido a la topografía del terreno sobre el que se asienta, se distribuye en una planta, pero a distintos niveles. En la planta baja del nivel 1, se sitúa la bodega, un cuarto de aperos y almacenes, que correspondían a los antiguos establos. La planta baja del nivel 2 corresponde al acceso, salón-comedor, cocina, un baño, un aseo y dos dormitorios. Próxima a la casa, en una construcción independiente y aislada, existe un trastero, el cual se proyecta la reforma para convertirlo en un pequeño estudio compuesto de salón-cocina-dormitorio y un baño. La cama está separada del salón por una celosía de madera.